El pulque: la bebida de los dioses

Por Jueves 27 de octubre, 2016.

pulque

“El pulque para los hombres y el agua para los bueyes”. Bien dice la sabiduría popular que al pulque solo le falta un grado para ser carne… y es por esto, que desde épocas prehispánicas, en el auge de Teotihuacán, ya se consumía pulque como suplemento dietético y para prevenir de enfermedades.

26 de octubre de 2016 (IBt)

Por  Angélica Lizbeth Espinosa

Pero ¿cómo se obtiene el pulque? Este sabroso licor, que quita todas las penas, las propias y las ajenas se obtiene de las pencas del maguey cuando la planta está madura, mediante el siguiente proceso: primero con una barreta, se retira la parte central y el corazón del maguey, generando una cavidad o cajete, en lo que se denomina castración; posteriormente, la cavidad se deja madurar durante aproximadamente un mes y se debe tapar con una manta para que no se introduzcan los insectos y el polvo. Posteriormente, se raspan las paredes y se succiona el aguamiel con un acocote (el recipiente con el que se extrae la bebida) y se deposita en un garrafón de 20 litros que se llama tinacal, en lo que se llama la maduración de la bebida; a continuación, viene la preparación de la semilla, que consiste en que el aguamiel se pone en un barril de madera donde se fermenta al cabo de varios días y se obtiene una bebida de color blanco, ácida y viscosa llamada pulque.

Existen varios mitos en torno al pulque. El más difundido señala que se utiliza una “muñeca”, que consiste en una tela llena de excremento con la que se fermenta el pulque. Y esto no es cierto. Cabe señalar que para la producción de esta bebida se requiere un proceso que debe ser muy limpio, porque si no ocurre así, no se produce el pulque.

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La Unión de Morelos