El huevo de la serpiente

Por Jueves 11 de agosto, 2016.

serpiente

El título de este artículo se refiere a una memorable película dirigida por Ingmar Bergman en 1977, ambientada en Berlín durante octubre y noviembre de 1923, en el clímax de la crisis por la hiperinflación y el hundimiento de la economía alemana.

10 de agosto de 2016 (ICF)

Por Kurt Bernardo Wolf

Tuvo que llegar la Gran Depresión de 1930 para que finalmente este partido obtuviera la mayoría relativa del 30% de los votos entre los muchos partidos en que se dividía el Reichstag, y que Adolf Hitler, considerado un extremista popular, bufón e ignorante, fuese nombrado canciller del Reich, renuentemente, por el presidente Paul von Hindenburg; el Canciller saliente, Franz von Papen, lo convenció con el argumento que sería fácilmente manipulable. ¡Craso error!

Este año, Donald J. Trump está contendiendo por la presidencia de los Estados Unidos de América (EUA) por el Partido Republicano. Bufón e ignorante, ha alcanzado sorprendente popularidad entre los machos blancos (sí, uso el término “machos”) con baja escolaridad y empobrecidos, que lo sitúan entre 30 y 40% de la intención de voto. Ya hemos oído de sus diatribas contra los musulmanes, mexicanos, mujeres, veteranos, discapacitados y cuantos se le paran enfrente. Y sin embargo, por eso mismo, ha crecido su popularidad y ha recibido gran cobertura gratis por la prensa y la televisión. Su propio partido, cuyas tácticas de obstrucción a toda iniciativa de Barack Obama le dieron pie, parece ser ahora un venado encandilado incapaz de moverse de la carretera [2]. La prensa internacional se ha preguntado sobre su salud mental, comparando su comportamiento discursivo con el de Benito Mussolini. Su lema de hacer “América (es decir, EUA) otra vez grande” refleja lo que Hitler peroraba contra el Tratado de Versalles, contra los judíos y contra toda la rica manifestación cultural en la débil democracia de la República de Weimar.

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La Unión de Morelos